El Museo de Antioquia, ubicado en el Centro de Medellín, es uno de los epicentros culturales de mayor relevancia en la ciudad, no solo por contar con obras de reconocidos artistas como Fernando Botero o de aclamados pintores internacionales como Picasso, sino por la gestión social y cultural que realiza en el sector.
Su constante difusión de herramientas educativas y sociales, ha permitido investigar, conservar y difundir el patrimonio de la ciudad. Con su estrategia Museo 360, ha priorizado su responsabilidad social, dando protagonismo a los habitantes de la zona y contribuyendo a transformar el imaginario de violencia del centro de la ciudad.
El Museo de Antioquia fue fundado el 29 de noviembre de 1881 por Antonio José Restrepo y el coronel Martín Gómez, bajo el nombre de Museo y Biblioteca de Zea, esto en honor al botánico Francisco Antonio Zea.
Sus primeras exposiciones incluyeron reliquias de la independencia, documentos manuscritos y pinturas coloniales, con un propósito educativo orientado a reconocer el pasado y fortalecer la identidad de la ciudad.
En 1905, por falta de recursos tras la Guerra de los Mil Días, el museo fue anexado a la Universidad de Antioquia. Entre 1926 y 1932 atravesó una fuerte crisis, sus colecciones fueron guardadas y los libros entregados a la universidad, permaneciendo cerrado durante 17 años.
En 1977 adoptó el nombre Museo de Antioquia, reafirmando su vínculo con la cultura del departamento. Hoy funciona aquí la Casa del Encuentro en la que hay una biblioteca especializada en el arte.
En 1872 comenzó la recolección de piezas para formar el primer museo del departamento y el segundo del país. Tras un periodo de exilio a comienzos del siglo XX, el museo se instaló en la antigua Casa del Aguardiente y la Moneda, a una cuadra de su ubicación actual. Hoy, ese edificio funciona como un ala experimental.
Desde que el Museo de Antioquia está en lo que fue hasta finales de los ochentas el Palacio Municipal de Medellín, miles de visitantes han podido contemplar este Patrimonio Arquitectónico de la Nación de 14.500 m2. Diseñado por Nel Rodríguez, arquitecto y urbanista, tiene influencias del Art Decó americano.
El Museo de Antioquia cuenta con más de 5.000 piezas: pinturas, dibujos, esculturas y textos que reúnen diferentes expresiones artísticas de la región y el país, además de objetos de gran valor histórico como armas, bienes personales, documentos, cerámicas, piezas de orfebrería indígena, textiles; entre otros.
Artistas que puedes encontrar
El Museo de Antioquia ofrece una amplia variedad de expresiones artísticas: pinturas, esculturas, tejidos y cerámica, disponibles para disfrutar en visitas individuales o guiadas, incluso bilingües. Entre las obras más destacadas se encuentran los cuadros de Fernando Botero sobre la muerte de Escobar y el carrobomba, que suelen atraer gran atención.
Sin embargo, el museo va más allá del arte expuesto, con programas culturales como “La tarde de hierbas”, centrado en plantas medicinales, o “La esquina del movimiento”, sobre el amor romántico. Además, cuenta con tienda, restaurante y múltiples espacios para el disfrute comunitario, reflejando que el Museo es Antioquia misma: su vida y su obra.
También desarrolla actividades participativas como creación de sellos, escritura creativa, elaboración de fanzines y pigmentos caseros, orientadas a fortalecer las capacidades e intereses artísticos de los participantes.
Finalmente, el museo realiza recorridos por comunas o corregimientos, con exposiciones, charlas y conversatorios que acercan su labor al territorio, promoviendo la valoración y apropiación de los espacios culturales del Distrito de Ciencia, Tecnología e Innovación de Medellín.
Sus horarios son de lunes a sábado de 10:00 a.m. a 5:30 p.m. y domingos y festivos de 10:00 a.m. a 4:30 p.m.
La entrada tiene un costo aproximado de 16.000 COP (4 USD aprox.) para visitantes nacionales y 40.000 COP (10 USD aprox.) para extranjeros. Las personas de estratos 1, 2 y 3 de la ciudad, al presentar la factura de servicios, tienen entrada libre.